El último post (o: De la libertad de expresión y otros demonios)
Después de casi dos años de llevar este blog, escribo hoy mi último post.
El contenido del blog permanecerá aquí por una o dos semanas más, luego de eso será eliminado o bloqueado (aún no lo decido).
No me voy a caer a embustes con que el blog cumplió su ciclo vital, y tal. La verdad es que, como ya he dicho, este blog es un diario, y me cansé de exponerme frente a tantas personas y de recibir ataques de gente que simplemente no entiende qué es lo que estoy diciendo y por qué. Y como quiera que no creo en la moderación de comentarios, en alguien que decide si lo que otro dice debe ser mostrado o no, y como quiera que todos aquellos que me atacaron durante estos dos años ejercían su pleno y legítimo derecho a la libertad de expresión, he decidido que lo mejor que puedo hacer por mi salud mental, es dejar de exponerme. En otros tiempos decía, como Voltaire, que a pesar de no estar de acuerdo con lo que decían, habría dado mi vida por defender su derecho a decirlo. Pero hoy, estoy cansada, y mejor que la dé otro.
No les diré que todo es culpa del blog. Quizás últimamente haya recibido demasiadas agresiones, desde diferentes flancos, por mi forma de ser y de pensar. Y es probable que tengan razón, y que yo sea todas esas cosas que dicen. Pero no se trata de eso, el caso es que estoy cansada.
Y me dirán que el mundo real es así o peor, y que tengo que adaptarme. Y la verdad les digo, que si también pudiera apartarme del mundo real, hoy, lo haría. Lamentablemente no puedo. Pero me pondré armaduras para que los golpes no me peguen tan duro, porque resulta que hay gente por ahí que una de las cuatro cosas en la vida que no se recuperan, es la palabra, después de proferida.
Mis disculpas para aquellos a quienes les gustaba leerme. Gracias por acompañarme, por los comentarios que me dejaron y por los que no, por cada vez que me leyeron y por los mails que me escribieron. A aquellos a quienes no les gustaba, y que se ocupaban de hacérmelo saber, una vez más les digo, que nunca entenderé para qué diablos, entonces, me leían.
Quizás, en algunos años, si todavía estoy por estos lares, se me olvide el dolor y reincida, como a las mujeres que dan a luz dos veces, o las que nos volvemos a enamorar a pesar de todo. En todo caso, hasta entonces o hasta quién sabe, me despido con la venia de estilo, y con afecto,
El contenido del blog permanecerá aquí por una o dos semanas más, luego de eso será eliminado o bloqueado (aún no lo decido).
No me voy a caer a embustes con que el blog cumplió su ciclo vital, y tal. La verdad es que, como ya he dicho, este blog es un diario, y me cansé de exponerme frente a tantas personas y de recibir ataques de gente que simplemente no entiende qué es lo que estoy diciendo y por qué. Y como quiera que no creo en la moderación de comentarios, en alguien que decide si lo que otro dice debe ser mostrado o no, y como quiera que todos aquellos que me atacaron durante estos dos años ejercían su pleno y legítimo derecho a la libertad de expresión, he decidido que lo mejor que puedo hacer por mi salud mental, es dejar de exponerme. En otros tiempos decía, como Voltaire, que a pesar de no estar de acuerdo con lo que decían, habría dado mi vida por defender su derecho a decirlo. Pero hoy, estoy cansada, y mejor que la dé otro.
No les diré que todo es culpa del blog. Quizás últimamente haya recibido demasiadas agresiones, desde diferentes flancos, por mi forma de ser y de pensar. Y es probable que tengan razón, y que yo sea todas esas cosas que dicen. Pero no se trata de eso, el caso es que estoy cansada.
Y me dirán que el mundo real es así o peor, y que tengo que adaptarme. Y la verdad les digo, que si también pudiera apartarme del mundo real, hoy, lo haría. Lamentablemente no puedo. Pero me pondré armaduras para que los golpes no me peguen tan duro, porque resulta que hay gente por ahí que una de las cuatro cosas en la vida que no se recuperan, es la palabra, después de proferida.
Mis disculpas para aquellos a quienes les gustaba leerme. Gracias por acompañarme, por los comentarios que me dejaron y por los que no, por cada vez que me leyeron y por los mails que me escribieron. A aquellos a quienes no les gustaba, y que se ocupaban de hacérmelo saber, una vez más les digo, que nunca entenderé para qué diablos, entonces, me leían.
Quizás, en algunos años, si todavía estoy por estos lares, se me olvide el dolor y reincida, como a las mujeres que dan a luz dos veces, o las que nos volvemos a enamorar a pesar de todo. En todo caso, hasta entonces o hasta quién sabe, me despido con la venia de estilo, y con afecto,
Marianne
Último Post scriptum: Las cuatro cosas que jamás se recuperan son: la piedra, después de arrojada; la palabra, después de proferida; la ocasión, después de perdida y el tiempo, después de pasado.
Comentarios
Reciba un cordial saludo.
Dirección de Trans_Bitacora
Es una lástima de verdad que decidas cerrar el blog, como en los 2 comentarios anteriores, a mí también me gusta leerte y realmente lo encuentro muy terapeútico, así escribas desahogos.
LAs razones,sean las que sean se respetan. Sin embargo no dejes de recibir las flores que también puedes recibir por tus letra más que las espinas.
Un gran abrazo y que la vida te siga generando buenos frutos, libros e historias.Saludos!
De verdad me parece que has crecido muchísimo como blogger y como escritora, por lo que debes pensarlo dos veces antes de tomar decisiones de este tipo, tendrás una horda de lectores iracundos con este post, yo personalmente voy a organizarte un cacerolazo en el trigal.
El hecho de que haya quienes te alaban y quienes te insultan quiere decir que realmente le llegas a la gente, que tus lineas dicen algo, que produces emociones fuertes en tus lectores y bueno, cada quien con su peo, puede que a algunos lectores Lassie les ladraba de chiquitos o que Flipper les echaba agua en vez de jugar con ellos, pero lo que tienen es una reacción emocional porque acaban de leer unas lineas que les llegaron a alguna parte y le despertaron alguna serpiente por dentro que los hizo sentir incómodos con ellos mismos (metáfora prestada de tu blog), pero no todos tenemos tu talento para escribirlo, hay gente que insulta y grita, pero no por eso te dejan de leer (la paradoja de tu angustia).
Perdón si me pongo ladilla, pero al menos tengo que tratar.
Como alguna vez lei algo (creo que del Quijote)...' Si los perros ladran es porque estamos andando...'
Si gue expresandote asi como eres porque esa es tu esencia, la que te hace tan especial y unica en este universo de palabras vacias, en lo personal, me encanta leerte porque siento que te conozco y me pareces intima y humana.
Mil saludos y sigue en la lucha , hermana !!!!
y no creas que los demás pueden hacerte daño:
ellos sólo pueden hacerse daño a sí mismos
adeu!