Mundo maravilloso, de Javier Calvo (4/52)

En este libro hay gángsters. Hay tráfico de obras de arte. Hay drogas. Hay sexo. Hay enfermedades mentales diversas. Hay soledad y familias disfuncionales. Hay una niña fanática de Stephen King. Hay montones de cosas. Y yo me pasé 544 páginas esperando a que la trama apareciera por alguna parte, y la verdad es que me quedé con la sensación de no haberla encontrado. Es decir, claro, hay una historia generacional, y hay muchas historias paralelas, pero igual me deja la extraña sensación que queda cuando alguien (v.g. en el trabajo) viene y me echa uno de esos cuentos completamente carentes de sentido y dirección, una de esas historias que terminan abruptamente en cualquier parte y que te dejan preguntándote por qué esa persona te hizo perder el tiempo con un cuento que no es un cuento.
Un cuento de 544 páginas.
Siendo justos con el libro, es entretenido. A excepción de ciertas partes, se deja leer con fluidez, lo cual ya dice algo. Hay algunos personajes significativamente interesantes. Pero nadie logrará convencerme jamás de que el libro transmite un mensaje (no en el sentido parábola de Paulo Coelho, sino en el sentido emisor-mensaje-receptor de Castellano y Literatura de 9no grado). Por ahí leí algo sobre la importancia de la técnica en la novela, y por un momento pensé que quizás sea eso, que la novela me resulta emocionalmente ajena, alienada en el sentido de extrañeza a las emociones humanas. Pero tampoco, porque resulta que no está bien acabada técnicamente, y sus asperezas gramaticales y de estilo también hacen incómoda la lectura.
La solapa dice que el autor tiene un "estilo Dickens". Pero todos sabemos que las solapas mienten con más descaro que un diputado.
Si, a pesar de todo, quieren comprarlo, confesaré que no recuerdo cuánto me costó, pero sé que estaba en descuento en la FILUC. Tecniciencia lo tiene en 46 Bs. F. Una lástima.
El ISBN a todo efecto: 978-84-8346-577-6. La publicó Random House Mondadori en su sello DeBOLS!LLO.

Disclaimer: Que no soy crítica literaria, ya dije. No me gustó el libro y punto.